Te mostramos cómo hacer algunos trabajos con la fresadora que mejorarán el acabado decorativo de los muebles que construyas y de todos tus proyectos de carpintería.
Herramientas y materiales necesarios:
CONSEJO PARA LA COMPRA DE LA FRESADORA
Si adquieres un juego de fresas, podrás realizar este y otros trabajos con la fresadora que te permitirán comprobar que resulta una herramienta insustituible para la realización de muchos de tus proyectos de carpintería.
Con la máquina desenchufada, fija la fresa en el husillo y aprieta firmemente con la ayuda de la llave.
Regula la profundidad de la fresadora en función del tipo de contorno que quieras conseguir ya que, según la altura a la que trabaje la fresa, se consigue un acabado diferente.
CONSEJO 1
Para este tipo de trabajos debes utilizar una fresa de contorno; si incorpora además rodamiento, este hará de tope, guiando el recorrido de la fresa, lo que te evitará tener que emplear la guía lateral de la máquina.
Antes de empezar a trabajar, enchufa la máquina y conecta la aspiradora a la salida de la fresadora prevista para ello.
CONSEJO 2
Aunque no es imprescindible utilizar una aspiradora, es muy aconsejable hacerlo ya que, no solo se gana en limpieza, sino que mejora sensiblemente la visibilidad del trabajo que estás haciendo.
Sujeta con sargentos el tablero al banco de trabajo, para evitar que se mueva mientras trabajas. Ponte también unas gafas de seguridad.
Apoya la base de la máquina en el tablero y presiona hacia abajo, hasta alcanzar la profundidad que seleccionaste al inicio. Bloquea el cuerpo de la fresadora en esta posición.
Arranca la fresadora antes de entrar en contacto con el material. Hazla avanzar suavemente por todo el perímetro de la pieza. Puedes repasar volviendo hacia atrás, por si en algún punto el contorno no ha quedado limpio.
ATENCIÓN
Al ajustar la profundidad, ten en cuenta que el rodamiento no debe perder nunca el contacto con la madera.